Capítulo 1
Tres grandes obstáculos amenazan el suministro de minerales para la movilidad
El riesgo geopolítico, las presiones de capital y las cuestiones ESG dificultan la obtención de reservas.
Asegurar un suministro adicional de los minerales y metales fundamentales para satisfacer la demanda de vehículos eléctricos requerirá actuar ahora para superar obstáculos importantes:
1. La incertidumbre geopolítica puede disrumpir la producción de minerales y restringir el acceso
El mundo tiene suficientes reservas de muchos minerales clave — el desafío es acceder a ellos. Gran parte de su producción está concentrada geográficamente y se ve limitada por factores complejos, como las dificultades técnicas en torno a la geología y la extracción, la política, las leyes, la normativa medioambiental, las restricciones de la tierra, la economía y las infraestructuras.
China controla una parte importante del procesamiento downstream del litio, el cobalto y el grafito, ya que las empresas estatales chinas han comprado o financiado minas para garantizar la compra para el procesamiento downstream.
La incertidumbre geopolítica es un riesgo creciente para las empresas mineras y metalúrgicas, como se destaca en el informe EY Top 10 business risks and opportunities for mining and metals in 2021. Los cambios normativos y las medidas de proteccionismo comercial amenazan la producción y el comercio de algunos minerales. Esto está impulsando a los países a considerar el desarrollo de capacidades nacionales o la diversificación del suministro mediante la creación de instalaciones de procesamiento fuera de China. El Gobierno de EE.UU. está invirtiendo en minerales críticos, la UE se está centrando en el desarrollo de una cadena de suministros para vehículos eléctricos2 y en Australia se sigue debatiendo sobre la inversión en instalaciones de procesamiento de minerales para baterías.
2. La inversión de capital se enfrenta a la volatilidad de los precios
El desarrollo de los nuevos proyectos necesarios para satisfacer la creciente demanda requerirá una cantidad significativa de capital. Canaccord Genuity estima que se necesitarán más de 20.000 millones de dólares de inversión de capital sólo para financiar los proyectos de litio para satisfacer las previsiones de demanda de 2030.3
Pero incluso con una perspectiva de demanda positiva, el acceso al capital en el sector minero sigue siendo difícil. Los inversores se ven disuadidos por la volatilidad de los precios, los largos plazos de entrega de los proyectos, la necesidad de evaluar cada vez más los factores ESG y el pequeño tamaño del mercado de algunos minerales en batería.
La volatilidad y el carácter cíclico del sector pueden provocar fuertes fluctuaciones de los precios, lo que puede afectar a los fundamentos económicos de los proyectos incluso cuando las perspectivas de la demanda son positivas. Por ejemplo, en los últimos años los mineros de litio invirtieron mucho en nuevos proyectos para aumentar la oferta y satisfacer la demanda de baterías para vehículos eléctricos. Sin embargo, la ralentización de la producción de VE a finales de 2019 y COVID-19 en 2020 hizo que el aumento de la oferta golpeara la volatilidad de la demanda, y los precios del carbonato de litio cayeron de una media global de 16.031 dólares/t en noviembre de 2017 a 6.387 dólares/t en octubre de 2020. Los subsiguientes desafíos de liquidez han llevado a algunos mineros a poner el gasto de capital en espera. Tianqi ha retrasado su decisión de inversión en la planta de Kwinana,4 mientras que Eramet ha dejado en suspenso su mina de litio en Argentina.5
Contrarrestar esta volatilidad de los precios significa que los accionistas deben estar preparados para invertir a largo plazo y tener en cuenta los largos plazos de los proyectos. Pueden pasar de tres a cinco años hasta que un proyecto minero sea operativo, y a veces más. Los proyectos de salmueras de litio pueden tardar más de siete años en empezar a producir.
Las materias primas con mercados más grandes -por ejemplo, el cobre y el aluminio- son más fáciles de atraer capital en comparación con los minerales menores. Incluso con el crecimiento de la demanda, se prevé que el valor comercial anual del litio y el cobalto en 2025 sea menos de una décima parte del del cobre. Pero los grandes mineros están empezando a invertir en minerales para baterías. BHP ha formado una alianza para explorar en busca de níquel en Canadá6, mientras que Río Tinto ha invertido en un proyecto de litio en Serbia y está produciendo litio como subproducto de su mina de boro en Estados Unidos.
3. Los productores deben adaptarse a las crecientes presiones de ESG
La forma en que se producen los minerales y las emisiones de carbono creadas durante su producción están siendo objeto de un mayor escrutinio, ya que los fabricantes se enfrentan a la presión de los gobiernos, los inversores y los consumidores finales para que las cadenas de suministros sean más limpias y éticas. Los mineros y los productores se están adaptando a través de procesos más limpios y nuevos productos innovadores, como los productos de aluminio de baja emisión de carbono de Hydro, fabricados a partir de chatarra reciclada postconsumo (por ejemplo, CIRCAL 75R)6 o metal primario procedente de fundiciones hidroeléctricas.
La procedencia de algunos metales, como el cobalto, suscita inquietudes en torno a los métodos éticos de producción y pone de manifiesto la demanda de cadenas de suministros más transparentes. Los fabricantes de baterías intentan reducir la cantidad de cobalto que se utiliza en ellas, y consiguen añadir más níquel como factor estabilizador. Sin embargo, esto conlleva otros desafíos de suministro y medioambientales. La mayoría de los descubrimientos recientes de níquel se encuentran en minerales de laterita (óxido), que suelen utilizarse para producir arrabio de níquel y ferroníquel para la industria del acero inoxidable. Pueden transformarse en níquel para baterías de clase 1, y las empresas de Indonesia tienen previsto hacerlo, pero el proceso puede provocar vertidos de ácido.8
Capítulo 2
¿Cómo desarrollan los fabricantes de automóviles y los OEM el suministro de minerales?
Las medidas adoptadas ahora pueden proteger la futura cadena de suministros de vehículos eléctricos.
Creemos que el riesgo de suministro de minerales es uno de los que las empresas del sector automotriz y los fabricantes de vehículos deben considerar ahora. Si no se consiguen los recursos, el crecimiento futuro y el desarrollo de los productos podrían verse afectados de forma significativa.
Algunos fabricantes de automóviles han recurrido a las adquisiciones para asegurarse el suministro de forma proactiva: Great Wall Motors ha comprado una participación del 3,5% en Pilbara Minerals,9 y Volkswagen ha adquirido una participación del 20% en el fabricante chino de baterías Guoxuan.10 Pero, en su mayor parte, se trata de un problema sin solución rápida. Normalmente, se tardan muchos años en desarrollar los recursos: hay que definir los proyectos, asegurar el capital, dar la aprobación reglamentaria y, a continuación, las minas y las infraestructuras se someten a un largo proceso de construcción. Incluso cuando todos estos factores están alineados, un proyecto puede verse socavado por una repentina caída de los precios de las materias primas.
Esta complejidad hace que las empresas deban considerar varias estrategias diversas para ayudar a garantizar la seguridad del suministro:
- Funciones comerciales: Los fabricantes de automóviles y de equipos originales podrían considerar la posibilidad de establecer funciones comerciales en los minerales, de forma similar a lo que hicieron las refinerías de petróleo cuando la producción de crudo pasó de empresas como BP a otras como Saudi Aramco.
- Acuerdos de compraventa o adquisición de participaciones directas: Estos acuerdos proporcionan confianza respecto a un suministro seguro. Por ejemplo, Tesla ha acordado con Piedmont Lithium que la empresa le suministrará aproximadamente un tercio de su producción prevista de concentrado de espodumeno (160 ktpa) durante un plazo inicial de cinco años.11
- Fondos de inversión: Tomar una participación indirecta en las empresas mineras no asegura directamente el suministro a las empresas, pero ayuda a garantizar una financiación adecuada de los proyectos mineros en general.
- Consorcios para orientar la política gubernamental: La formación de consorcios con otros actores del ecosistema puede ayudar a influir en los gobiernos para que adquieran minas y construyan cadenas de suministros nacionales de VE.
- Colaboraciones proactivas para abordar las consideraciones ESG: La colaboración con los mineros puede ayudar a los fabricantes de automóviles y a los OEM a reducir más eficazmente las emisiones a lo largo de la cadena de valor, a disminuir su impacto medioambiental y a proteger los derechos humanos de los trabajadores.
- Utilizar la cadena de bloques para confirmar el abastecimiento responsable: IBM, Ford y el Grupo Volkswagen han puesto en marcha la Responsible Sourcing Blockchain Network,12 que está ampliando el abastecimiento ético de minerales.
- Explorar el reciclaje y la reutilización: Reutilizar las baterías de los vehículos eléctricos ofrece una importante oportunidad para conservar los recursos.
Acelerar el futuro de la movilidad
La electrificación del transporte será un elemento importante de la transición hacia un futuro energético con bajas emisiones de carbono. Pero a menos que podamos desarrollar un suministro adecuado y seguro de las reservas minerales fundamentales para la e-movilidad, esta transición puede estancarse. Actuar ahora puede mitigar los posibles riesgos de suministro. Los fabricantes de automóviles y de equipos originales que adopten un enfoque múltiple pueden superar tres grandes obstáculos y construir una sólida cadena de suministros de vehículos eléctricos para el futuro.
Resumen
La electrificación de la movilidad será un paso importante hacia nuestro futuro energético sin emisiones de carbono. Pero asegurar este futuro dependerá de que los fabricantes de automóviles y los OEMs actúen ahora para asegurar el suministro de los minerales clave para la construcción de vehículos eléctricos, baterías e infraestructura.
