El futuro pertenece a las empresas que son ágiles, receptivas y resilientes. Puedes incorporar esas características clave en tu negocio aplicando los cinco elementos de diseño que se detallan a continuación. Se muestran como un listado, pero todos están interconectados. Ser bueno en uno o dos es bueno, pero no es suficiente – es necesario dominarlos todos. Y debes hacerlo de una manera que genere y mantenga confianza – con los consumidores, tu gente y todos los socios de tu ecosistema.
1. Aprovechar los ecosistemas dinámicos
Haz que tu organización forme parte de un ecositema conectado, dinámico y flexible que integre a tus consumidores, clientes, proveedores, socios, empresas de investigación de datos, start-ups – y a veces incluso a tus competidores. Todos en el ecosistema tienen un papel en la creación de valor. Todos se beneficiarán de una parte de ella.
2. Incorporar lo digital y los datos a tu ADN
Crea una organización que escuche, una basada en datos y analítica que te permita tomar las decisiones correctas en el momento adecuado. Las redes digitales y sus flujos de datos son el tejido conectivo y el sistema nervioso que permiten que funcione el "cuerpo" del ecosistema. Muchas empresas están priorizando la analítica, pero eso no es suficiente.
3. Adoptar la flexibilidad del talento
Desarrolla personas con habilidades profundas en áreas clave como la tecnología y la transformación de datos, pero también necesitas generalistas brillantes en todas las funciones con la mentalidad y las capacidades necesarias para trabajar juntos de nuevas maneras. Una fuerza laboral y una cultura adaptables prosperan cuando se apoyan en las tecnologías emergentes y nuevas formas de trabajar.
4. Innovar a escala
Involucra a todos en el esfuerzo por innovar. Las personas de primera línea, que se ocupan de los consumidores y los socios del ecosistema a diario, suelen ser las mejores fuentes de ideas. Pero estas ideas a menudo no se capturan, o los procesos rígidos impiden que obtengan tracción. Las empresas más innovadoras apoyan culturas, tecnologías y procesos que captan, desarrollan rápidamente y escalan ideas que funcionan.
5. Dejar que tu propósito modele todo
Incorpora el propósito de tu organización en todo lo que tú y tu gente hacen cada día. Definirá sus propuestas de valor, su rol en los ecosistemas, cómo atrae y retiene el talento, con quién se asocia y qué consumidores sirve. La sostenibilidad y el propósito son impulsores clave del valor, pero no siempre son una parte integral de las operaciones.