Cada 17 de mayo se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia para recordar la eliminación de la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales por parte de la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud. En este contexto, es importante reflexionar sobre los avances, los pendientes, las recomendaciones para las organizaciones, así como la situación actual del reconocimiento de derechos para personas LGBTI+ en México, en comparación con otros países.
Una lucha en constante progreso
Dentro de los avances se encuentran la armonización —ya sea mediante proceso legislativo o por acato a la Suprema Corte de Justicia en cuanto a jurisprudencia o resoluciones— del acceso al matrimonio igualitario en México. Es importante destacar que dicho tribunal resolvió que resulta discriminatorio que el matrimonio se contemple únicamente entre mujer y hombre, y que los poderes legislativos en las entidades federativas están limitados en su margen de actuación para no impedir el matrimonio igualitario.
Igualmente, en los últimos años se han realizado levantamientos demográficos en México que permiten cuantificar a la población LGBTI+ a través de la Encuesta sobre Diversidad Sexual y de Género (ENDISEG) implementada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI); y en Colombia por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE). Asimismo, en nuestro país se comenzó con la emisión de identificaciones oficiales para personas no binarias y pasaportes para personas trans.
Para seguir avanzando en la lucha contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, es importante reconocer la prevalencia de la violencia hacia personas LGBTI+. De acuerdo con organizaciones de la sociedad civil como Letra S, México se encuentra entre los primeros lugares en este rubro. También es importante transitar hacia la garantía de la empleabilidad de personas trans.
Acciones clave para las empresas
Las compañías deben establecer alianzas con organizaciones de la sociedad civil para avanzar en temas de derechos LGBTI+. Lo anterior puede lograrse si se suman a certificaciones como HRC Equidad AR (Argentina), BR (Brasil), MX (México); revisan continuamente políticas, procesos, estrategias de atracción de talento y marca empleadora; amplían los beneficios a parejas del mismo sexo; y comparten buenas prácticas con la industria y el mercado en torno a la inclusión LGBTI+.
Cuentas pendientes en la región
América Latina y el Caribe son heterogéneos en cuanto al reconocimiento de algunos derechos hacia la población LGBTI+. En este sentido, México tiene un avance considerable en comparación con otros países de la región; a pesar de ello, continúan existiendo violaciones a los derechos humanos de las personas LGBTI+.
En América continental sigue pendiente la aprobación del matrimonio igualitario en Guatemala, Belice, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Panamá, Perú, Paraguay y Venezuela. A pesar de que en algunos lugares como Bolivia se han realizado uniones civiles, siguen sin considerarse como matrimonios, entendidos como figura legal. Asimismo, muchas naciones insulares continúan criminalizando el ser LGBTI+, entre ellas Jamaica, Santa Lucía, Granada y Dominica. En algunos Estados como Antigua y Barbuda o Saint Kits y Nevis no tiene más de cinco años de haberse legalizado.